La emperatriz aburrida
Todo comenzó cuando la emperatriz Catalina la Grande enfermó levemente. Por ello, no pudo salir a dar un pequeño paseo. Para pasar el rato, empezó a leer catálogos con diversas delicias arquitectónicas que le habían traído especialmente de varios países. Vio por casualidad los frescos de Rafael que adornaban las logias vaticanas. Quedó tan impresionada que mandó construirlas en su palacio.
Hablamos de las cosas que Pedro el Grande trajo de Ámsterdam, que a los rusos les parecían extrañas.
La Loggia de Rafael en el Vaticano. Foto: Erin Mc/flickr.com Para dar vida a la idea de la emperatriz, fue necesario obtener el permiso del Vaticano para estudiar estas logias, realizar los cálculos necesarios y dibujar copias de los frescos. Finalmente se obtuvo el permiso y los arquitectos rusos se pusieron manos a la obra. Tuvieron que construir nuevas salas para reproducir la arquitectura europea. Por desgracia, calcularon mal, y esto sólo se hizo evidente cuando los frescos estuvieron terminados. Habría sido extremadamente difícil rehacer toda la obra, por lo que se tomó la decisión de reconstruir las salas. Los arquitectos no consiguieron reproducir exactamente las logias. Los pilares, que se midieron en el Vaticano, tuvieron que hacerse más estrechos, y los marcos de las ventanas tuvieron que insertarse de forma diferente. En todos los demás aspectos, el trabajo realizado fue colosal: era difícil reproducir con exactitud todos los rasgos de la obra de Rafael, pero los arquitectos lo hicieron lo mejor que pudieron, y hoy estas salas son el orgullo del Hermitage. Rafael se inspiró en temas bíblicos y en el estilo de los antiguos frescos romanos a la hora de crear su obra. Se necesitaron varias docenas de sujetos para decorar la sala. Se dividieron convencionalmente en 13 secciones en función de su ubicación en la sala. Además de temas bíblicos, los frescos presentaban una variedad de diseños geométricos y algunos también representaban criaturas mágicas. ¡No me extraña que a la emperatriz le gustara tanta belleza! Cinco razones por las que me encanta Kuala Lumpur Los artesanos rusos tuvieron que reproducir exactamente todos los temas de los frescos de Rafael, y tardaron varios años. Cuando los salones estuvieron terminados, quedó claro que eran una de las partes más impresionantes del palacio. Escenas bíblicas en frescos del Hermitage. Foto: joannethompson7/flickr.com A lo largo de la construcción se bromeó en el extranjero diciendo que la emperatriz era tan reacia a ir al Vaticano para ver las logias en persona que le resultó más fácil construir una réplica exacta en Rusia. Te hablamos de las exposiciones más insólitas de la Kunstkammer.
Trabajo duro
Logias en el Hermitage. Foto: Ryan Hadley/flickr.com Historias bíblicas
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