Vemos películas de ciencia ficción sobre todo tipo de gente increíble, pero ni siquiera sabemos que hay muchas cosas que son inusuales en la vida real. Por ejemplo, poca gente sabe que entre nosotros viven personas-árbol. Por desgracia, no están dotados ni de magia ni de superpoderes, y su condición es una rara enfermedad genética llamada epidermodisplasia verruciforme (síndrome de Lewandowsky-Lutz). En total, hay unas 10 personas en todo el mundo a las que se les ha diagnosticado esta enfermedad. Son propensos a la infección por el virus del papiloma, que provoca la formación de numerosas verrugas planas en la piel, que se multiplican con el tiempo.
El hombre árbol no puede llevar una vida normal. La patología no sólo afecta a su aspecto, sino que también detiene el funcionamiento de los miembros infectados. Al crecer hasta alcanzar tamaños enormes, los bultos de las manos y los pies dificultan el cuidado personal y causan dolor. Los médicos no pueden curar una enfermedad así, ni cambiar la genética. Sólo pueden ofrecer a los pacientes la opción de extirpar los tumores, lo que sólo les facilitará la vida durante un breve periodo de tiempo. Sin embargo, no hace mucho, los médicos israelíes fueron los primeros en arriesgarse y realizar una compleja operación para extirpar las capas más profundas de la piel en las zonas donde la enfermedad más había progresado. Su paciente era Mahmoud Talouli, de 44 años, de la ciudad de Gaza. Ya se ha sometido a cuatro intervenciones quirúrgicas con éxito y a una vacunación especial contra el VPH. Hasta ahora, el tratamiento va según lo previsto y se ha detenido la aparición de nuevos crecimientos. Por supuesto, tiene que someterse a un largo periodo de recuperación y al menos a una operación más, pero los resultados ya son buenos. Según Mahmood, ya puede hacer algunas cosas y sus manos tienen mucho mejor aspecto que antes. Los premios más importantes del Imperio Ruso
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