Hay varios lugares en el mundo que siguen siendo un misterio para los estudiosos y buscadores hasta el día de hoy. Entre ellos, el valle de Bada, en la provincia indonesia de Sulawesi Central, donde se encuentran los antiguos monumentos de piedra del Parque Nacional de Lore Lindu. Muchas de ellas aún no se han documentado formalmente. Algunas tienen formas intrincadas y unas 30 representan seres humanos.
Complicada datación de misteriosas estatuas de piedra
Estos insólitos monumentos fueron descubiertos en 1908. Pero en los últimos cien años se ha aprendido poco sobre ellos. Aún no se sabe con exactitud cuándo se fabricaron. Algunos sugieren que ocurrió hace unos 5.000 años. Otros creen que ocurrió en una época muy anterior, por lo que tienen un vínculo directo con la cultura que dejó megalitos en Laos, Camboya y partes de Indonesia hace 2000 años. Quiénes fueron las personas que hicieron estos monumentos es otro misterio. Aunque se ha sugerido que fueron realizadas por la misma civilización que dejó monumentos en otras partes del sudeste asiático, las esculturas del valle de Bada son únicas y, por tanto, pueden pertenecer a una cultura totalmente distinta. A estas alturas, nadie sabe exactamente quién los fabricó. La finalidad de los megalitos también sigue siendo oscura, aunque muchos investigadores han especulado al respecto. Los lugareños, por ejemplo, creen que algunos de los monumentos se utilizaban antaño para venerar a los antepasados y cuentan leyendas sobre su origen. Los premios más importantes del Imperio Ruso Por ejemplo, hay un monumento hecho en forma de hombre. Se dice que fue un hombre considerado violador en vida. Por eso, fue convertido en piedra. Los cortes profundos que tiene son heridas de cuchillo. Se cree que el otro megalito fue en su día el protector de la aldea. Sin embargo, él también era culpable de robar arroz. También fue convertido en una estatua de piedra como castigo. Otro grupo de investigadores cree que el lugar está asociado a sacrificios humanos. Y, en general, las «estatuas» estaban destinadas a ahuyentar a los malos espíritus. Los investigadores más avanzados creen que los monumentos tienen poderes sobrenaturales y pueden moverse en el espacio. Dicen que fueron vistos en un lugar por la mañana y en otro por la tarde. Las piedras con las que se tallaron los megalitos probablemente procedían de otra zona. Esto significa que los artesanos que fabricaron las estatuas tenían probablemente un nivel de organización social que les permitía afrontar este proyecto. Las tallas de los megalitos se han descrito como minimalistas. Las figuras humanas suelen representarse con cabezas increíblemente grandes, el cuerpo recto y sin piernas. En cuanto a los rasgos faciales, suelen tener ojos redondos y una sola línea marca las cejas, las mejillas y la nariz. Muchos están solos, otros en parejas o grupos. Aparte de las estatuas, el valle de Bada también es famoso por sus embalses circulares formados por bloques de piedra individuales. Se pueden encontrar en varias partes del valle. Tienen diferentes tamaños y formas. Algunos tienen una abertura en el centro y tabiques. Se especula con la posibilidad de que se utilizaran para enterramientos o como cisternas de agua. Se han encontrado pesadas tapas de piedra en las proximidades. En definitiva, hay más misterios que respuestas. ¿Tiene alguna suposición?
Hipótesis sobre creadores y finalidad
Las estatuas de piedra no son el único misterio del valle
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