Las ardillas, los patos y los ratones son criaturas muy monas, pero en miniaturas, créeme, son aún más adorables. La artista y bióloga Fanny Sandor crea pequeñas figuras de animales tan diminutas que caben en la punta del dedo. Cada miniatura anatómicamente correcta se crea a escala 1:12 y se moldea a mano con arcilla polimérica. Una vez terminado, el artista lo pinta en tonos realistas, para que se parezca lo más posible a un animal de verdad.
Sandor confiesa que desde niña le fascinan todas las cosas en miniatura. Creó su primera microescultura a los seis años con palillos, cera, papel y pegamento.
El objetivo de Fanny es hacer las figuras lo más parecidas posible a animales reales utilizando sus conocimientos de biología. Por eso, antes de esbozar las esculturas, estudia detenidamente fotografías del animal. A continuación, utiliza diversas herramientas para esculpir con el mayor detalle posible. Y al final da vida a su impresionante obra utilizando pintura.
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