Admitámoslo, muchos soñamos con una réplica superguay. Algunas personas asocian este sueño con los buenos viejos tiempos, otras con una maravillosa película de época en la que un elegante caballero arrasa con cualquier belleza llevándola en un viaje inolvidable en su pulido hasta relucir clásico de cuatro ruedas. Por supuesto, estos coches cuestan una fortuna hoy en día, pero no te puedes equivocar soñando, ¿verdad?
El suizo Frederick Müller también fantaseaba con tales máquinas. Sólo que de un tipo ligeramente diferente. El artista los ha plasmado en una serie de instantáneas deliciosas. En su obra, el diseño único de coches emblemáticos se entrelaza con los contornos de animales salvajes, adquiriendo una apariencia irreal.
Los premios más importantes del Imperio Ruso
Aston Martin 1963
Aston Martin 1963
Chevrolet Corvette 1968.
Chevrolet Corvette 1968.
Ford 250 1967.
Ford 250 1967.
Fiat 600S 1977
Fiat 600S 1977
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